domingo, 3 de enero de 2016

Algunas notas sobre la fortificación de Ciudad Rodrigo en el siglo XVII que recogen los libros de acuerdos (II)

Aunque parezca evidente, tal vez algún despistado no se haya percatado que en el periodo en el que nos encontramos, en 1652, Ciudad Rodrigo y su tierra estaba en el fragor de los acontecimientos bélicos vinculados al levantamiento de Portugal en 1640 y que se extenderían hasta la paz alcanzada en 1668. Evidente era pues que una de las preocupaciones de los regidores mirobrigenses y, por extensión de sus vecinos, fuera intentar garantizar su defensa, tanto de la plaza fuerte -se había caído un lienzo de la muralla, en la zona del Hospital de la Pasión; se pueden apreciar los restos en la subida de la calzada del Puente Mayor a la Puerta de Santiago y se constata también por el uso de cantería y sillares en vez del típico calicanto-, como de sus arrabales, especialmente el de San Francisco, el más poblado y que contaba con una destartalada cerca que partía desde la Puerta de los Sexmeros -al lado de la Puerta del Sol-, continuaba por la calle de la Magdalena -hoy Agustín de Foxá-, volvía hacia el convento de Santo Domingo -hay restos visibles junto a la residencia de Asprodes-, cruzaba las calles Cárcavas y Rastrillo -de ahí sus nombres-; cambiaba su dirección hacia lo que hoy se conoce como Plaza de los Herradores y enfilaba cruzando la huerta de San Albín -por la estación de autobuses- hasta cerrar con la muralla medieval a la altura, más o menos del revellín del Calvario, cerca de la Gran Brecha.

sábado, 2 de enero de 2016

Algunas notas sobre la fortificación de Ciudad Rodrigo en el siglo XVII que recogen los libros de acuerdos (I)

Hace ya tiempo que no me acercaba al blog. Ni siquiera había tenido prurito en ojearlo. Otras obligaciones me embargan y apenas tengo tiempo para dedicarlo a la labor de investigación. No obstante, entre mis archivos figuran algunas referencias que considero importantes para nuestra particular historia y que había ido compilando durante algunos año a la espera de que sirvieran de muleta para redactar algún artículo o monografía sobre distintos aspectos de la historia local. Entre esas referencias hay bastantes vinculadas a distintos aspectos de la fortificación, especialmente desde mediados del siglo XVII que pueden servir para comprender los avatares y preocupación que marcaban la vida municipal en aquel entonces. Sin tratamiento alguno, más que algunas matizaciones y concreciones para entender el acuerdo, las iré divulgando a través del blog, aunque, como se puede comprender, sin visos de continuidad formal.